Anton Glanzelius cuenta de la grandeza de su amistad con la estrella del pop

Anton Glanzelius

En 1988, Michael Jackson entró en contacto con la estrella de entonces 14 años de edad, de "Mi vida como un perro" Anton Glanzelius.

Recuerda el día que pasaron juntos en Liseberg, el parque de diversiones más grande de Escandinavia. El parque fue cerrado al público en general por el bien de Jackson y la privacidad de sus amigos.  La noticia de la muerte de Jackson fue un shock para Glanzelius que en aquel momento tenía 35 años de edad. "Yo no lo podía creer al principio. Cuando se confirmó, me sorprendió. Fue tan extraño que haya sucedido tan cerca de su gira y su regreso", dice Glanzelius.

Anton Glanzelius en "my life as a dog" (1987)

Anton Glanzelius conoció a Michael Jackson por primera vez cuando tenía 13 años. Jackson había visto la película "Mi vida como un perro", dirigida por Lasse Hallström y con Glanzelius como la estrella principal, y lo había disfrutado tanto que invitó al muchacho a su casa en neverland. Michael había visto la película dos veces, la segunda vez con su madre. La película fue muy especial para él, pero Jackson no reveló el porque significaba tanto la pelicula para el, a Antón. Cuando tenía 13 años de edad, creció en el sur de Gotemburgo, no tenía idea de quien era Michael Jackson.

Michael y Anton cuando visitaron el parque de atracciones en Erikberg, Gotemburg (1989)

"Corrí a la casa de los vecinos y les preguntó si tenían alguna foto o registro con Michael Jackson. Quería ver cómo era". Antón llegó a Neverland junto a su madre. Pasaron un par de horas en compañía de Jackson, pero no llegaron a conocerse tan bien ese momento. Antón recuerda que Jackson era muy educado. "Recuerdo que caminando por ahí conocí a su llama y a una serpiente gigante. Luego se fue a despertar a bubbles y lo trajo abajo.  bubbles llevaba una camiseta roja y un pañal y me estrechó la mano. Pensé que era más extraño cumplir con un chimpancé que con Michael Jackson ", dice.

"Él tenía una habitación llena de caramelos y me comí todo lo que yo quería." Glanzelius explica que él era probablemente demasiado joven para darse cuenta de la grandeza de su amistad con la estrella del pop. "Cuando era niño, tiene una perspectiva diferente", dice. Anton Glanzelius describe a su amigo como "muy buen corazón y humilde". En el escenario era un artista que influyó en el mundo. En privado, él era muy tímido. "Era un tipo muy común que vivió una vida extrema desde el principio."

Cuando Jackson llegó a Gotemburgo en 1989, se puso en contacto con Glanzelius. "Fue una experiencia increíble y divertido como un niño de 14 años. Glanzelius recuerda que montó la montaña rusa "Loopen", su paseo favorito de Michael en el parque, una docena de veces. "Se reía constantemente, nos divertimos mucho."

El director de marketing de Liseberg, Pelle Johansson, había estado trabajando en el primer semestre de Jackson 89 para llevar al parque de atracciones. Jackson iba a celebrar un concierto en Erikberg, Gotemburgo, y los propietarios de Liseberg vieron su oportunidad para poner el parque de atracciones en el mapa. Ellos hicieron cientos de llamadas telefónicas y envió cartas a Jackson y sus directivos, pero todavía era incierto si él iba a aparecer.

"No creo que realmente funciona. La gran cobertura de los medios hacía difícil para él dejar hasta el hotel y llegar hasta aquí", dice Johansson. Jackson llegó con su amigo Glanzelius y una compañía de aproximadamente 100 personas. "Hemos cerrado el parque y que eran capaces de moverse a su antojo en el parque sin ningún tipo de fotógrafos o periodistas. Lo único que pedía a cambio era la huella de la mano."

Los techos estaban llenos de fotógrafos tratando de obtener una imagen de los Jackson sonriendo. La visita duró de 3-4 horas. Jackson y Glanzelius también montaron los coches de choque, que realmente disfrutaba. "Estaba bromeando y riendo y nos estaban persiguiendo unos a otros tratando de conseguir un éxito. Era muy dulce, humilde, cálido y encantador."

Glanzelius también pasó la noche en el dormitorio de Jackson, viendo películas y comiendo dulces. "Traté de hacer que me mostrara algunos de sus movimientos, pero él no quiso, era tan tímido! Él dijo que era diferente a actuar frente a 50 000 personas . Hablamos de todo, desde el fútbol y la fama, a las niñas y el amor ", dice. "Era imposible para mí entender lo que se desea una superestrella en los EE.UU., solo tenía 14 años de edad. probablemente le hice algunas preguntas muy estúpidas", (Glanzelius se rie al recordarlo).

La última vez que se conocieron en 1992 en Estocolmo. Se mantuvieron en contacto a través de cartas y Jackson a menudo le envíaba paquetes con regalos y videos. "Estábamos muy cerca, pero luego perdimos el contacto, no me acuerdo por qué", dice. Glanzelius Jackson recuerda con cariño, y está en shock al escuchar la noticia de la muerte de la estrella. "Es tan devastador. No quiero creerlo. No pasa nada, tenía sólo 50 años de edad, es demasiado pronto".