Chad "Cleveland" Muska
Así fue. Recibí una llamada de Circa un día preguntando si le podía dar mi número a alguien de la oficina de Michael Jackson.
Dije, "Eso es una mierda. No me lo creo. Pero en fin, dar mi número por si acaso". Y diez minutos después recibo una llamada de una señora y dice algo como "Hey llamo tal y cual de la oficina de Michael Jackson y nos gustaría saber si podrías ir a Neverland Ranch en dos días".
Dije, "Para ser honesto contigo, no me creo nada de esto. Pero si fuera cierto, obviamente me encantaría conocer a Michael en Neverland". Pasa un minuto y vuelven a llamar. Lo cojo y una voz aguda me dice "Hey Chad, soy Michael". Juro por Dios que el corazón se me paró un segundo. Me dice como, "Si, mira, han pasado otras cosas y me encantaría si pudieras venir mañana".
Digo "¿Mañana?".
Me dice "Si. Creo que mañana puede ser un buen día para que vengas".
Luego me dice "Me pregunto si conoces a Stevie Williams también. Queremos que venga Stevie".
Le digo, “OK. Claro. Sería la leche si viniera Stevie. Lo que tú digas, tío".
No recuerdo exactamente cómo ocurió, si le llamaron a él por su lado, pero básicamente Stevie estaba de vuelta de Vancouver al día siguiente y fue así, "Mandaré mañana por la mañana una furgoneta para ustedes y recogeremos a Stevie en el aeropuerto de camino”. Durante todo el tiempo, mi pensamiento era "Ashton Kutcher nos está vacilando" Entre tanto, mientras estoy con esta conversación, Anthony Moseley, que en esa época patinaba para Shorty, estaba sentado en mi sofá escuchando. Así que, por supuesto, cuelgo el teléfono y me suelta, "Voy con ustedes tíos". Como no me creo que sea cierto le digo, "Claro, te puedes venir conmigo". Pensaba que si me estaban vacilando, a él le vacilarían conmigo.
Así que Moseley pasa la noche en mi sofá, nos levantamos al día siguiente y pregunto si puedo llevar a un amigo. Al principio se muestran algo reacios pero le digo, "Es un skater profesional" y me dicen "OK, que se venga". A la media hora llega una furgoneta negra a casa. Era como un viejo cruiser de los 80 con una tele en blanco y negro emitiendo viejos dibujos animados. Lo llevaba un chofer de unos 75-80 años con sombrero y uniformado.
Subimos y nos acercamos al aeropuerto de LAX y yo voy buscando dónde estaba la cámara oculta diciendo "Se que me están vacilando. No me engañaran". Pensaba que me iban grabando. Llegamos al aeropuerto y Stevie entra con su madre. Se había enterado y como supongo que es una gran fan le debió decir a Stevie, "¡Me voy contigo! No hagas preguntas". Subimos todos y el viejo no dice ni una palabra más que nos lleva a Neverland Ranch. Es un camino jodidamente largo desde LAX. Está hacia el norte por Lampoke y esa zona. Estamos de camino, hay tráfico y nos lleva un nonagenario. Y todo el rato estoy esperando a que Ashton Kutcher salte desde el asiento trasero.
Llegamos finalmente, estamos en la puerta y nos dicen que no podemos llevar cámaras y todo eso. Se abre la puerta y nos acercamos por la larga carretera hacia Neverland. Segun arrancamos vemos a un par de elefantes acercarse por el campo haciendo un pequeño baile levantando sus patas. Luego aparece un camello corriendo. Luego vemos a todos los empleados en fila haciendonos reverencias. Nunca he visto nada igual.
El tipo viene a saludarnos, era como un cuidador o algo. Nos lleva dentro y nos sentamos en un sofá y dice, "Michael estará pronto con vosotros". Así que estamos sentados allí tres minutos, y se nos hacen como tres horas y de repente, "Boom" entra Michael. Sólo recuerdo a la madre de Stevie de pie con las manos en el corazón diciendo "Oh dios mio. ¡Es Michael Jackson!” Y todos nos partimos de risa. Él empezó a reirse también y alucinamos. Era simplemente genial desde el primer momento, y se sienta en el sofá diciendo "estoy feliz de conocerlos". Nos presenta a su primo o su sobrino que estaba metido en el tema de los monopatines y le había puesto videos a Michael, supongo que lleva años viéndolos. Supongo que el hecho de que hubieramos ido Stevie y yo tenía que ver con aquello de los videos. Conocía a Stevie y sabía quien era yo. Y su primo o lo que fuera resultaba ser bastante bueno con el patín. Era una locura.
Comenzó enseñándonos su salón donde tenía fotos con todo mundo, con todos los que te puedas imaginar. Su primo está ansioso y Moseley también así que lo siguiente que se de ellos es que se van. Michael dice, "¿Dónde van?" Yo, Stevie y su madre decimos "Bueno, nosotros estamos aquí. Sigamos". Así que Michael nos lleva a ver los campos. Todo. El museo. Sus guantes. El tren. El parque acuático. La montaña rusa. Había tanto. Ni podía creerme lo que estaba ocurriendo. Recuerdo haber pensado "Voy a tener que esperar a que esto acabe antes de poder empezar a creerme lo que acabo de ver".
No parabamos de mirarnos con cara de incredulidad. Luego fuimos al zoo, Michael decía, "Miren esto, a los tigres no les gusta esto" llevaba un paraguas, y lo abrió y lo cerró muy deprisa delante de los tigres, y los tigres se volvieron locos, como rugiendo y saltando de un lado al otro de la jaula. Recuerdo que vimos X-Men en su cine antes de que saliera al público. Lo que entonces era increíble.
Ya al final, fuimos al piso inferior y tenía una pista de baile y una sala de recreativos junto a una bodega. Supuestamente allí es donde pasó toda esa locura. Le hicieron beber Jesus Juice (vino de consagrar) o algo así. De cualquier forma, erea cuando estaba pegando 50 Cent. Bajamos allí y vi a Michael Jackson hacer un moonwalk mientras sonaba In Da Club! Me sentía como en Charly y la Fábrica de Chocolate y él era Willy Wonka.
Todos nos llevamos una camiseta muy chula. Moseley consiguió unas gafas, como unas Ray Ban doradas y una chaqueta de cuero. Era como, "No. No quiero nada". Como si por hacerlo bien pudiera conseguir el Ticket Dorado para estar en Neverland para siempre o algo así (risas). Recuerdo pensar al final, "Maldita sea, tenía que haber cogido unas gafas de esas". Para mi, este hombre es una persona increíble y la gente puede decir lo que quiera sobre él: era raro, era diferente, esto o aquello, pero quiero decir, ¡coño que sí! era diferente a todos nosotros, era Michael Jackson. Aquel día fue el más surrealista que me ha tocado vivir. Y punto. RIP MJ.