Roney Giah
Roney Giah, un cantante, compositor, guitarrista y productor en Sao Paulo Brasil cuenta una increible anecdota de su fascinante doble encuentro con Michael Jackson por allá en el 93 cuando aun era solamente un estudiante de musica y acababa de llegar a los Angeles, esta es su historia:
Yo era un estudiante de música en Los Ángeles y que fue en mi primera semana en Estados Unidos. La historia que precede a la escena y su secuela es más o menos simple, con la excepción de la magia que lo rodea.
Eran mis primeros días en M.I. (Musicians Institute), una escuela de música en Los Angeles, estudié desde 1993 y me gradué hasta mediados de 1994. Sólo tenía que encontrar un lugar para vivir en alquiler, un garaje de una casa en Highland Park a solo 15 minutos del centro de Hollywood. Una casa tranquila, donde viví durante 16 meses, cuyo dueño amablemente, se convirtió en una gran amistad que perdura hasta hoy.
En la primera semana de la escuela, tuve la oportunidad de tomar algunas lecciones con Jennifer Batten, la guitarrista en el momento de Michael Jackson, que alucinó al mundo de los solos de guitarra virtuosos y su energía increíble.
En mi primer sábado estadounidense, después de mi debut en la universidad, fui invitado por George Briozzo, un maestro amable de la casa para ir a la playa en Santa Mónica, ya que no tenía un coche.
había un sol caliente, pero moderado, a diferencia de la costa brasileña que era un horno de costumbre, una arena muy fina y lejos del agua fría que se rompía en la playa, el falafel en un papel para evitar el hambre y las buenas conversaciones. Al final de nuestra sesión de mar, a las 16 horas íbamos a obtener el aparcamiento para ir a casa cuando se escuchó el sonido de un pitido, George me agarró del brazo y me dijo en voz baja, tratando de no mover los labios:
- ese Cherokee verde y el que esta bocinando a nosotros es un amigo mío, Adrián. Si nos invita a almorzar, responda "no". La última vez me llevó un restaurante muy caro aquí en Malibú, y tuve que pagar una cuenta de 4 meses.- me dijo George.
asi es que nos reunimos con Adrían hasta su camioneta.
Desde la ventana abierta, sonriente, muy amable, nos saludó emocionado, preguntó cuál era mi nombre y después de una breve presentación y sin contemplaciones nos preguntó:
- ¿Vamos a almorzar?
George dijo que no inmediatamente pero Adrián insistió.
George dijo que el estacionamiento sería costoso, que ya era tarde y que acababa de comer un falafel.
Adrian dijo: Entonces, ¿qué?
muy Brasileño y abierto, interrumpí la conversación ridícula, confesando:
- ¿Sabes que Adrian? somos dificiles. Así que tiene que ser en un lugar muy barato o que nos ayude a pagar la cuenta.
Adrian dejó de sonreír, mirando hacia abajo rápidamente y yo quien hace las matematicas en mi cabeza le dijo:
- claro, ven pronto, antes de que cambie de opinión. .
Entonces fuimos, el primer restaurante estaba cerrado, eran las 4 de la tarde
Adrian dijo: Yo sé de uno abierto y muy agradable.
Un minuto más tarde, todavía en Santa Mónica (donde vivía Michael) y sentado en el asiento trasero del coche ví algo que era matemáticamente improbable:
Por el reflejo del cristal de la ventana de un café francés en la calle, vi una puerta abierta de un GMC Van furgoneta limusina blanca dejando a Michael Jackson. Yo no sé si se me hizo claro, pero para que conste: Si se trataba de 1 o quizás 2 segundos más tarde, o quizás antes, o incluso sentado en el asiento delantero, no hubiera tenido el ángulo suficiente para ver el reflejo de una ventana y por lo tanto, ver a Michael abriendo la puerta. Todo parecía demasiado curioso.
Pero estaba claro para mí lo que tenía que hacer.
le hablé con toda la falta de intimidad que tenía con el propietario del transporte:
- Adrian ... para el coche. Michael Jackson está entrando en un café en la calle.
- ¿Quién?.- me preguntó el
- Michael Jackson.
- ¿Cómo lo sabes?
- lo acabo de ver.
- ¿Y si era un doble?
- ¿En una GMC van limusina de medio millón de dólares?
Adrián de buenas cuentas y sin palabras no detuvo el coche, le hablé en un tono más ansioso:
- ¡¡Adrián, detén el coche, por favor!!.
- Incluso si lo es, ¿qué vas a hacer?.- me preguntó
- Adrian y George se intercambiaron una mirada en el espejo retrovisor y él entendió que yo estaba en un estado algo negociable. Paramos el coche ya muy lejos y corrí hacía el café, antes de entrar miré a los guardaespaldas de la limusina, eran tres y jugaban a las cartas muy indiferentes. En el Café estaba vacío, solo estaba una pareja de ancianos comiendo un helado.
Le pregunté al unico camarero de la casa que estaba secando vasos:
- ¿Dónde está Michael?
- ¿Que Michael?
Tenía que descifrar el enigma de inmediato, lo creas o no, Michael Jackson se había estacionado solo para ir al baño y nadie lo vió entrar en el lugar. lo busqué en el cuarto de baño y nada ... el lugar era amplio.
Hasta que del otro lado de la puerta del balcón abierto vi que salió Michael.
Adrian, quien ya había entrado y yo estaba allí, lo recibimos con alegría.
Con pasos apresurados llegamos a Michael:
gafas de sol ray bans, el hombro dorado, pantalón negro y camisa negra (sin la parte delantera dorada famosa de los uniformes, de una manera más "informal"), me saludó. Con las manos en el bolsillo y muy relajado, se paró como si esperara una conversación (porque en mi mente me hubiera saludado, y se hubiera marchado a toda prisa).
Impresionado por el repentino interés, le dije:
- sabe?, yo estoy tomando lecciones de guitarra con Jenniffer ...
- ¿En serio?
Y así, de la nada ... ahí estaba yo ... hablando de música con Michael Jackson con los pies llenos de arena. Hablamos de la guitarra, le gustaba el estilo de Jenniffer, su banda de música. Hasta que me preguntó de dónde era y yo le comenté que venía de Brasil.
- ¿En serio? Y en un tono más optimista me dijo:
- Hombre, me encanta Brasil ...
Le pregunté por qué no había tocado todavía en Brasil (que fue en febrero de 1993 ... Yo, obviamente, me gusta pensar que el único espectáculo que hizo allí 10 meses después y tuvo que ver con nuestro chat). Él me preguntó si yo pensaba que la gente iba a la feria. (Lol XD)
- ¿Estás bromeando? Deslicé hacia arriba, usted tiene más fans allá que aquí.
Se echó a reír. Comenzó a moverse hacia la puerta de salida poco a poco...Pensé y le pregunté:
- ¿se tiene que ir?, ¿verdad?
- No.... quiero un helado ... ¿Quieres uno?.- me preguntó Michael
- Claro. (Caramba, cómo la escritura surrealista al respecto)
Sin embargo, en la calle, se acercaba la otra realidad: había unos adolescentes que estaban cerca esperando su salida, tal vez porque sentían que no podían entrar en el Café .. no sé.
allí me acabé de dar cuenta que estaba en mi momento de intimidad con él y hablé sin pensar:
- Michael, quería actuar con usted. Una canción que le acompañara en la guitarra, me daría inspiración para toda la vida.
- Se detuvo y se volvió. Con una leve sonrisa, me dió las palabras que me dieron más confianza en la búsqueda de 20 años de carrera artistica que la vida me ha permitido conocer. Sacudiendo la cabeza afirmativamente, sus ojos y su cara como diciendo "Eso es todo niño. Esa es la actitud. "
Él respondió con prontitud:
- Okay, dame tu tarjeta.
- No tengo tarjeta de todavía. acabo de llegar de Brasil hace una semana.
- Michael miró en un florero sobre la mesa, se levantó y tomó un papel que estaba debajo.
- Mira ... Escribe tu número aquí.
- Yo escribí mi teléfono (que en realidad era de mi amigo George Briozzo) apoyado sobre sus hombros.
Se fue. entoces los adolescentes atacaron.
Me alejé y me senté en estado de shock.
Yo lo vi tomar el helado, pero creció la multitud y se metió en su limusina con helado en la mano.
Antes de salir, se detuvo y miró en el café, como si estuviera mirandome. Pensé:
- No se puede ...
Pero si, Llegó a la puerta, me vió sentado. tomó el papel con el teléfono y lo sacudió en el aire, como si dijera: ¡¡a joder con coraje hermano!! ...
Me pasé un mes atrapado en el teléfono. Compré nuevas cintas a una secretaria. Pero no le importaba ... sniff...El único comentario de George ese día fue: "De ninguna manera! Michael Jackson tiene mi número
Su presencia estaba en calma y fue sin duda el más humilde como estrella del pop que yo conocí, hablamos y me trataba como a un igual, a pesar de su magnitud aparente. 2 meses más tarde, y después del alboroto, salí de la universidad para el almuerzo.
Caminé a través de los callejones de Los Ángeles, de esos callejones que aparecen en la película (refieriendose a Moonwalker). El personal de la escuela dijo que era demasiado peligroso caminar por los callejones, pero para un brasileño como era una broma ...en serio - incluso había unos cuantos aros de baloncesto colgando para los pro bandidos para jugar.
De repente, caminando solo, veo a una furgoneta GMC Van limusina blanca que venía a mi camino de 2 horas, apretados en el estrecho pasaje, que no pueden entrar los coches, de hecho ...
Creí que:
- ha me estarán tomando el pelo?
No. El objetivo no estaba bromeando.
Era el coche de Michael con cuatro policías que lo acompañaban en su espalda hacia mí.
Tuve que parar, ni siquiera podía pararme junto a su ventana, porque era demasiado estrecha para pasar la camioneta.
La limusina se detuvo. La puerta se abrió. Michael salió.
Justo cuando estaba en el callejón. Me acerqué a un policía e hizo un gesto con la mano, "pasate por allí".
Michael se dió cuenta de la tensión y me miró. Se detuvo y sonrió, como si él sabía que yo sabía, pero en realidad no recordaba de dónde. Vaciló, vino hacia mí, pero la policía le puso la mano sobre su espalda y se detuvo.
Él policia puso su dedo índice en lugar del reloj (incluso sin usar reloj), como si dijera:
- Wow ... que tarde ... pero se detuvo a hablar.
Yo sonreí. El me dió el adiós. Corrí a la calle. En el bulevar de Hollywood tuvo una ceremonia en el Museo de Cera en su figura de cera en primer lugar.
Aquí en Brasil, hace cinco años, tomando un vino con RPM Paulo Ricardo, Luis Carlini y el personal de la discoteca que tenía, la carpintería, Luis Carlini, dijo que Michael dió un pedal de Wha Wha para él cuando se conocieron en el vestuario del Palacio de Convenciones de Anhembi, en un espectáculo mucho después de los Jackson 5.
El rey de la Bondad.
El Rey de la Danza.
El Rey de la Música.
El Rey del discurso.
El Rey del Pop
Un beso para ti, mi hermano, que nos ayudó a soñar sin siquiera saberlo.
Roney Gia
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