Michael Jackson prohibía la entrada a su rancho Neverland a quien fuera necesario si su chimpancé Bubbles no le daba su aprobación, pues según dijo en alguna ocasión, "sabe juzgar el carácter de la gente".
"Bubbles era como un indicador de personalidad para Michael. De él dependía si una visita entraba en casa o no, él decidía quién era de fiar y quién no", comentó una antigua ama de llaves del rancho al periódico The Sun.
Su ex empleada afirmó que estaba convencida de que Michael acudiría a Bubbles si tuviera que solucionar él mismo el conflicto, ya que al parecer, el rey del pop estaba convencido de que su mascota tenía un instinto para averiguar quién trataba de aprovecharse de su fortuna.
No hay comentarios :
Publicar un comentario