Quisiera poder imaginar que en el vacío de mis horas brilla la esperanza de verte llegar, de verte vivir, de verte sentir, cantar, bailar... ¡Y Ser!
Quisiera imaginar que no es cierto que te has ido, que existes aún, en algún lugar virgen e inexplorado del mundo, quizá sea el de mi propio corazón que no ha podido asimilar aún tu inesperada partida.
Han pasado doce meses de aquél fatídico momento en que la noticia de tu deceso le dió la vuelta al mundo Michael, 365 días en que tu corazón dejó de latir para volar hacia la inmortalidad de tu ser, donde los ángeles cantan su gloria sembrando la semilla en el camino celestial para convertirla en coros musicales de bienaventuranza al todopoderoso.
Ese camino se extiende ante mi y no logro entender esto que estoy viviendo, todo se confunde en mi interior, el extrañar tu amada presencia y el recordar todas tus locuras y excentricidades, tus bromas, tus risas, tu talento, tu armonía, tus sueños y todo lo que dejaste de hacer, es difícil describir la sensación de saber que estás... pero no estás.
Han pasado por mi mente tantas cosas todo este tiempo, tu vida, la mía... ¡La realidad aplastante! más de un millón de veces he pensado en el momento en que exhalaste tu último aliento, cuántas veces prometí que no lloraría...a tí no te gustaban las lágrimas, pero...¿cómo evitarlo?
Estoy unida a tí porque tu recuerdo así lo dicta mi corazón, recuerdo tu alegria y me carcajeo, escucho tus canciones y las canto y bailo, pero también recuerdo tus últimos momentos y me quiebro en llanto. Es incluso divertido pensar en aquellos conciertos de lujo en que todo era felicidad, armonía y entrega con tu público...¿recuerdas tu primera navidad en neverland? ¿esas maravillosas guerras de pasteles y las supersoakers? ...esos días en los que fuiste tan feliz.
Mi alma es ahora tan vacía, mientras que en el silencio en que quedó mi vida te buscó, todo ahora me parece tan soso, tan vago, tan inútil y me da miedo saber que ahora es mi turno de salir al mundo completamente sola, extraño la ilusión que me dejaste.
Si pudiera decir qué cosas extraño más de ti, te diría que añoro tu ternura..tu dulzura...tu melancolía, diría que extraño tantas cosas de tí, que ya no se si te extraño o si te convertiste en parte de mí. Si pudiera decirte algo, ahora que estás lejos, pero no puedo. ¿Qué cosas te diría si te tuviera frente a mí?. Te diría quizá que adoro escribir sólo para ti, por que así de grande ha sido tu influencia en mí y en mi vida.
Te hablaría quizá de mis noches de soledad buscándote entre mis sueños, buscando tu alma en los recuerdos, te hablaría de cómo te busqué mientras sabía que nunca te tendría. Ahora no puedo hacerlo, por más que hable y por más que escriba, no puedes escucharme y tampoco leerme...tengo tanto que aprender sobre el olvido, tengo tanto que aprender sobre el amor pero ahora para mí, tú eres más que un espacio vacío en mi corazón, que nada logra llenar.
Cuán difícil es recordar, pero es doloroso saber que es una de las pocas cosas que quedan de aquél bellísimo ayer que me dejaste, sigo amándote con toda mi alma Michael, siente un dolor que no comparte, es difícil recordar que ya no estas pero es reconfortante saber que te conocí y que no te olvidaré nunca jamás. Sin embargo hoy hace un año entraste en reposo y solo quiero darte las gracias por legarnos a todos los que te amamos algo tan hermoso: Tu obra!!!...gracias por regalarme a mí, la esperanza que pierde su propia esencia, en las transmutaciones de todo lo pudo haber sido posible y no fue.
De mi corazón para el tuyo, donde quiera que estés Mike...
LidiaZuly
